Desde hace relativamente poco a comenzado a escucharse un concepto relacionado con el mundo de Internet: “Internet Social Responsibility” o “Responsabilidad Social Corporativa en Internet”.
La Responsabilidad Social Corporativa (RSC) se define como la contribución activa y voluntaria al mejoramiento social, económico y ambiental por parte de las empresas, con el objetivo de mejorar su situación competitiva y su valor añadido y diferencial.
La responsabilidad social corporativa va más allá del cumplimiento de las leyes y las normas, dando por supuesto su respeto y su estricto cumplimiento. El cumplimiento de estas normativas básicas no se corresponde con la Responsabilidad Social, sino con las obligaciones que cualquier empresa debe cumplir simplemente por el hecho de realizar su actividad. Sería difícilmente comprensible que una empresa alegara actividades de RSC si no ha cumplido o no cumple con la legislación de referencia para su actividad.
La responsabilidad social corporativa pretende buscar la excelencia en el seno de la empresa, atendiendo con especial atención a las personas y sus condiciones de trabajo, así como a la calidad de sus procesos productivos.
En Internet, este concepto está muy vinculado a todo el campo de las redes sociales, llegando a convertirse éstas en una herramienta indispensable de comunicación para la empresa (a finales de 2008, Facebook alcanzó los 150 millones de usuarios en su web; en febrero de 2009, 300 mil en España; aproximadamente el 50% de los usuarios se conectan diariamente).
Este tipo de espacios web se han convertido en un nexo de unión entre empresario, empleados, clientes, etc.; llegando a producirse un vínculo entre todos lo stakeholders de la entidad. Por ello, el empresario, junto a su página web, tiene la oportunidad de mostrar con completa transparencia toda la información de la empresa: noticias, invitaciones a eventos, formaciones abiertas interactivas, informes, hechos ocurridos dentro de la empresa, álbumes de foto de la empresa, etc.
Por otro lado, a las redes sociales se le ha asociado el Social Media Marketing (SMM), cuya diferencia con IRC se encuentra en sus fines, que son comerciales, frente a la transparencia de la empresa y búsqueda de valores reputacionales diferenciables del resto de la competencia.